Piometra en Mascotas: Emergencia Veterinaria

Piometra en Mascotas: Emergencia Veterinaria

La piometra o metritis es una emergencia veterinaria y una de las patologías más comunes en perras no estériles y de edad avanzada. Los tratamientos hormonales previos, los celos sin preñez y algunas condiciones médicas que afectan el sistema inmune también pueden aumentar el riesgo. Alrededor del 25% de la población canina está afectada por esta condición.

Por otra parte, en gatas, la incidencia tiende a ser marcadamente menor debido a que, si no son montadas, no ovulan.

¿Qué es la Piometra?

La metritis es una infección bacteriana que se genera en el útero. Es una enfermedad grave y potencialmente mortal si no es diagnosticada y tratada a tiempo. Existen dos tipos de piometra: a cuello o cérvix abierto y a cuello o cérvix cerrado. La diferencia entre ambas radica en la expulsión o no de la secreción.

Signos Clínicos

Si bien esta afección no presenta signos clínicos específicos, es frecuente evidenciar:

  • Eliminación de secreción purulenta y hemorrágica de muy mal olor (solo en piometra abierta)
  • Vómito, diarrea
  • Lamido de la zona vaginal
  • Enrojecimiento de la vulva
  • Polidipsia, poliuria
  • Decaimiento, apatía, depresión y anorexia
  • Deshidratación
  • Fiebre
  • Abdomen distendido
  • Dolor al movilizarse o caminar

¿Cómo se Diagnostica?

Ante la duda, lo primero es recurrir al médico veterinario, sobre todo si se observan estos síntomas después del celo. En la consulta, el médico realizará un chequeo junto con la anamnesis. Los exámenes complementarios, como la ecografía abdominal, el examen sanguíneo y el urinario, nos aportan el diagnóstico definitivo.

Tratamiento

El tratamiento de elección es la cirugía, con la extirpación del útero y los ovarios infectados. La urgencia de esta intervención está relacionada con la rapidez del diagnóstico. Si la piometra está avanzada, puede existir daño en la matriz, generando peritonitis. Si el daño no es severo pero los exámenes sanguíneos señalan septicemia, es altamente riesgoso someter al paciente a cirugía inmediatamente, por lo que se recomienda estabilizar al paciente en el hospital antes de la intervención bajo anestesia.

Prevención

La única forma de prevención es la esterilización temprana.

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